Valientemente y cuando autoridades medrosas permitían la apologia del delito de terrorismo -delinquiendo por omisión- al olvidarse de las leyes y su misión de aplicarlas cuando se trata de defender la Patria
Efectivamente, el Congresista y ministro mencionado públicamente presentó pruebas de la comisión del delito de Apología del terrorismo cometido por casi un centenar de personas durante la “presentación” del LIBRO DE ABIMAEL GUZMAN -supuestamente escrito por este asesino-, en esta cita pública miembros de su maldita cúpula hasta lanzaron arengas, amenazando con volver a hacer lo mismo en agravio de todos los peruanos.
Lo que causó sorpresa fue la presencia de abogado senderista Alfredo Crespo, defensor de ABIMAEL GUZMÁN al lanzar su discurso apológico y quien se esperaba debiera haber estado en prisión pero al parecer, estaría libre. ¿Quién lo liberó? Eso será tarea del Procurador del ministerio de Justicia, lo mismo que de denunciar al resto de delincuentes terrorista que participaron en esta verdadera orgia criminal que solía desarrollarse en la década de los 80, y cuya actividad delictiva esta penada por la Ley de Apologia del Terrorismo, ratificada hasta por el Tribunal Constitucional y que hace algunos días autoridades del Estado que debieron haber actuado de oficio se hicieron de la vista gorda cobardemente, mientras los terroristas declaraban “ZONA LIBERADA” el local donde ofrecieron su conferencia.
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